Esquince 30/05/2010, Ansiedad

Fotografía de Margaritt

Falso trailer de Blade Runner

Fran

A partir de la obra La ansiedad
de Abel Coca Marín

Indoo

A partir del poema Esta isla
de Ricardo Triviño Sánchez

Para salir de esa isla
no hay barco ni avión
sólo "Superfuerza" en acción.

Nadando a contracorriente
se llega hasta la fuente
que te sacia
que te llena el gran vacío
de las entrañas empujando.

Que era ansiedad decían
mentira sólo era sed
y esa sed sólo se sacia
aprendiendo
a nadar contracorriente
hasta llegar a la fuente.

Oniria febril y onanista,
congoja de las cosas del amor
o de por qué los versos eneasílabos no sirven para nada

Madame Blavatsky


Para que sepas a qué sepo,
Te he preparado yo una trampa,
Que es incisiva como un cepo,
Una marisma movediza,
Es marisopla quebradiza,
Taimada vileza del hampa.

Roncándome tengo en el chepo,
Sombra de tu maldita estampa,
Por verla cada noche trepo,
Alma con arma arrojadiza,
Imprecisa y escurridiza,
Luna y montaraz por la rampa.

Que todas las noches discrepo,
A veces te veo en la pampa,
Y por ser lejano te increpo,
A veces, ¡seré fronteriza!
Yo te muerdo, enojadiza:
Pues por fin tu inconstancia escampa.

Quiero decirte a lo que sepo,
Que yo te tengo aquí una trampa,
Que te quiero y te descepo,
Con una avidez enfermiza,
Que no hay poción bebediza,
Que me destierre de tu hampa.

El último momento

Sonia Teruel

Esta isla

Ricardo Triviño Sánchez

esta isla enorme
sin final ni explicación
en mitad del pecho
en el centro de la creación
como un ahogo
una carencia

primigenia como el hambre
o la supervivencia olvidada
bajo un manto de silicio
entre transistores y
amasijos de cables
y computadoras
donde sin embargo late
todavía
como un pulmón desesperado
en un cubo de metacrilato
como una medusa de carne
en un mar de aguas cristalinas
y venenosas

su misterio inextinguible
no lo apagan
epílogos ni purgatorios putrefactos
ni maravillas
la luz no se derrama
sobre las montañas inmóviles
se queda
en el recodo de los desagües
mientras las serpientes de las sábanas
se enroscan en las rodillas de los sueños
y en sus piernas
y en sus brazos
y en sus cuellos

ni muertos
existe un punto final para esta isla
donde las pupilas dilatadas
se enfrentan a las uñas
y a los dedos y a los labios
a los lápices y bolígrafos
a los envoltorios
a los muñecos de goma
al tapiz de los sillones
a la madera de los escritorios
al metal de los botones
al fuego de los mecheros

un territorio
que se expande como la palma de una mano
pero que se cierra como un puño
desde el estómago hasta la garganta
de filósofos y físicos
de pastores
de siglos enteros
a través de la red que se teje
rizomática
bajo el trapecio de la rutina
y la falsa calma
como la vista que se aleja desde los acantilados
donde no se divisa tierra alguna
ni escapatoria

no existe barco
para salir de esta tierra
a la deriva
que no desaparece
por muchas pastillas que procuren
sellar la boca
del volcán que la consume
y crea:

esto es un hueco
no se llena
sólo arde y quema

La ansiedad de Abel

Abel Coca Marín



Vota el penúltimo Esquince

Los temas sugeridos para el 30/6 son:

  • La mierda
  • La selva

Ya sabéis que se debe votar con ID Google.

Las votaciones se cerrarán el 31/05 a las 23:59.

Salu2

30/6: Penúltimo Esquince

A ver qué se nos ocurre para el penúltima Esquince de esta segunda temporada. La primera ya en DVD en vuestros establecimientos habituales. XD En fin, propongan temas.

Hay tiempo hasta el 26 a las 17:00 (16:00 en Canarias).

Os aseguramos que será mejor que el penúltimo capítulo de Lost. XDDD

Salu2

Esquince Gastronómico 15/05/2010

Página de Paulo Cacais

Bombons de gallina

Hatsue

Ingredients

1 gallina
2 rajoles de xocolata
Mantega
70ml de Bailey’s
140ml de nata líquida

PAS 1

Matem la gallina.
MATA!

PAS 2

Bullim la gallina al microones fins que es fongui. Cada minut la removem fins que estigui desfeta.

PAS 3

Amb el líquid de la gallina omplim la cubitera. Donem la volta a la cubitera per a què s’escoli el líquid de la gallina. Un cop escorregut posem la cubitera a la nevera durant 15 minuts.

PAS 4

Preparem el farciment: escalfem la mantega i la nata líquida fins que la mantega es fongui. Llavors, hi afegim la xocolata i remenem fins que es cohesioni. Aquest serà el moment de posar-hi el Bailey’s i remenar fins que estigui tot ben barrejat.

PAS 5

Traiem la cubitera de la nevera i la reomplim amb la crema que em fet abans. Vigilem de no omplir-ho fins a dalt de tot perquè després s’ha de tancar. Ho tornem a posar tot a la nevera entre 5 o 10 minuts.


PAS 6

Afegim el que ens ha quedat de la gallina per tancar el bombó. Vigileu que no sobresurti.

PAS 7

Ficar els bombons al congelador durant 1 dia. Llavors, amb molt de compte i aigua calenta, els traieu del motlle.

CONSELL DE LA MAMA

Compte amb els lladres de bombons!

La gastronomía de Abel

Abel Coca Marín

Lo primero, se coge el plato de pasta que la cerda de tu compañera de piso se dejó sobre la cocina el domingo pasado. Se debe pensar que los macarrones tienen vida propia y necesitan de reposo.


Lo segundo, se llena un cazo de agua, mejor si está un poco caliente, para que luego no dé tanta grima. Pero fría también sirve.


Se echa la pasta dentro, con cuidado, por supuesto de no salpicar.


Se remueven con la mano para que se suelten durante 1 o 2 minutos. No está de más llevar las uñas arregladas, sobretodo si se tienen invitados, que los hay que les da cosa.


Se cuelan. Este paso es el más delicado, puesto que se pueden escapar algunos por los bordes. Si es así, sólo hay que mirar que nadie se haya dado cuenta. Volver a meter al cazo y repetir el proceso.


Ya está. Se sirven tal cual o bien al punto de sal. Solamente recordar que si se utiliza agua fría para el proceso, se pueden después meter los macarrones un minuto en el microondas, si se trata de comer caliente.


Buen provecho y ya me contaréis si os ha funcionado.

Mester de Tortillería – Tortilla Española
en Versos de Cuaderna Vía para Ilustrados

Madame Blavatsky

Con gran plétora de aceite de oliva dorada,
Fríase la papa, pulcramente y bien pelada,
Añádase cebolla, sin llanto desgajada,
Remuévase con tino, espumadera alzada,

Agárrense los huevos, sin que haya quebrantada,
Bátanseles sin duelo, en viscosa colada,
Incorpóresele tuberculosa tostada,
Y mézclese la masa, con tesón combinada.

¡Primeramente habráse con sal sazonada!
Los óvulos contado con precisión puntuada,
Calculada la proporción de la congregada,
Bien catado con cuchara y la boca apretada.

Póngase oro líquido, en la cantidad contada,
En sartén caliente, ojinegra y baldeada,
Arrójese caterva, como alud de nevada,
Aplástese despacio, moldeando la fritada,

Y cuézase muy lento, fuego de enamorada,
Avezado de vueltas, dele ídem sonada,
Y al regirar la torta, de costra torrada,
Déjese que se cuaje a la lumbre sosegada.









Fast food

Sonia Teruel

Roast chicken stuffed with wild rice
(o “El pollo canadiense”)

Clementine & Leonard

La siguiente receta no es propia, ni mucho menos. Es el resultado de ver Karakia durante años y comer la misma comida todas la semanas: al final te cansas de esperar a que la comida sepa diferente y te pones a cocinar tú (cosa, por otra parte, que creo que agradece mi mater). Como iba diciendo, esta receta la saqué de la tele, ese sitio donde sólo dan programas del corazón supuestamente (oigan, yo nunca los pillo, están seguros de que no los buscan aposta?). Pero no por ello tiene menos mérito, que al fin y al cabo la que consigue que no se queme soy yo, no la tele. Así pues, una Navidad cansada de empanadas gallegas, me lancé a preparar este plato, que ha venido con el tiempo a conocerse como "el pollo canadiense" en mi casa, y que como alguien no detenga a mi mater voy a comer cada domingo del año. El único que no lo había probado era Leonard, y si no fuera por él, este esquince sería de un simplón bizcocho. Sin más dilación, paso a la receta en sí (he puesto mis variantes en cursiva):

- 1 pollo de unos 2,5 kgs (nosotros usamos uno de 1,5 kg, ya sabréis escoger segun lo que comáis, no?).
- 6 boniatos (esto es para acompañar, a mí me encantan, pero el resto del mundo parece odiarlos, así que he sido condenada a comer siempre este plato incompleto).
- sirope de arce (es para ponerlo encima de los boniatos, si no os gustan entonces no tenéis excusa para usarlo).
- miel (para pintar el pollo, totalmente prescindible).
- zumo de limón, salvia y tomillo

Para el relleno:

- 400 g de carne picada de cerdo (al gusto también, yo odio la carne picada, así que le pongo menos).
- 250 g de arroz salvaje (OJO! Salvaje, que no integral. Y todo salvaje, no mezclas raras con arroz blanco, que queda fatal. No encontramos arroz salvaje para hacer el esquince y me arrepiento muchísimo de no haber buscado más. La gloria de este relleno es el arroz salvaje, que quede claro!)
- ajos tiernos
- cebolla tierna
- pimiento rojo
- apio
- orejones
- almendra cruda
- pan duro (nunca le he puesto, no creo que sea vital).
- puerro (añadido totalmente en el último momento, por probar).
- tomillo, salvia, laurel, sal y pimienta.

Vamos, la cosa sería más o menos así:


Y luego cortarlo todo bien picadito, mientras se va haciendo el arroz a parte. Una vez cortado es cuestión de ir echándolo en una sartén, según se vayan haciendo las verduras. Cuando éstas estén hechas, se pone la carne, y por último el arroz casi a punto (quizás es mejor que se acabe de hacer todo junto).



Una vez está hecho el relleno, es hora de preparar el pollo. Cuando vayan a comprarlo a la carnicería o al super, señoras, asegúrense de que no tiene cabeza (o vísceras), si no tendrán que pedirle a su gentilhombre que lo decapite, mientras miran para otro lado pudorosamente.


Una vez que el pollo está presentable, sólo hay que proceder a rellenarlo por el hueco de lo que vendría a ser el culo. Sobrará relleno, por supuesto, pero como está que te mueres de bueno, da completamente igual. De hecho, normalmente hacemos el doble, para que dure unos cuantos días.


Y dicho esto, sólo queda meter el pollo en el horno, esperar una hora más o menos, y cruzar los dedos para que salga con esta pinta tan estupenda. No es por presumir (bah, a quién le voy a mentir, claro que presumo!), pero nos salió buenísimo!

Tenpura Udon

Ricardo Triviño Sánchez

El Tenpura Udon es una sopa japonesa hecha con tenpura y fideos udon. Yo lo hago un tanto diferente, porque no le pongo alga nori, pues me da asco, y añado un puñado de cosas más que no aparecen en la receta de la que aprendí. Poco importa. Cada uno puede hacerla a su gusto.

ingredientes

Para empezar necesitaremos los siguientes ingredientes (para 2 raciones):
  • 150g de fideos udon
  • 60 ml de salsa de soja (que no sea de marca Heinz sino japonesa)
  • 60ml de mirin
  • 1 cucharadita de dashi instantáneo
  • 4 langostinos
  • 6/8 tirabeques
  • 1 zanahoria
  • 1 cebolla
  • 2 cebolletas
  • 3 huevos
  • 1/2 pechuga de pollo
  • Tofu
  • 250ml de agua helada
  • 150g de harina de tenpura
  • 75g de harina de trigo


comenzamos

Este es un plato cuyas partes se cocinan por separado y luego se junta todo, lo cual lo convierte en un plato muy sencillo. Puedes preparar la mayoría de ingredientes antes y guardarlos preparados en la nevera. Es aconsejable dejar el tenpura y el caldo para el final. Cortamos el tofu en dados. Hay que ir con cuidado porque es tan delicado que si eres vasco lo destrozas.



Lavamos la verdura. Seguidamente, cortamos la zanahoria en rodajas, la cebolla en aros y le sacamos las puntas a los tirabeques. Descabezamos y pelamos los langostinos sin retirarles la cola. En nuestro caso, los langostinos son gambas chiquitajas. Lo realmente triunfador es meter unos bien grandes, de esos que te piden fuego. Mientras tanto, escalfamos dos huevos (uno por comensal) sin dejar que la yema se cuaje y los apartamos.


udon

El udon es una pasta que me encanta. Son fideos a la cazuela sigfredianos. Largos como espagueti pero sin el inconveniente de que se embrollen entre ellos y no puedas comértelos a gusto ni que uno de ellos te propine un tomatoso cimbrelazo en la cara.

Llenamos una cazuela de agua y la llevamos a ebullición. Echamos el udon y, cuando el agua rompa a hervir de nuevo, bajamos el fuego. Hay que removerlos para que no se peguen. Sería dejarlos a fuego lento durante unos diez minutos; después, escurrir y pasarlos por agua fría para detener la cocción.



pollo

Salpimentamos el pollo troceado, lo pasamos por la plancha y lo apartamos.


Sí, ya está. No tiene más. Lo troceas y a la plancha. ¿Y para esto un apartado? ¿Y dónde lo meto si no?, que diría Nacho Vidal.

tenpura

Recuperamos la zanahoria, la cebolla, los tirabeques y las gambas para realizar el tenpura. En un plato ponemos la harina de trigo sola. En un bol aparte, hacemos la masa de tenpura. Empezamos a batir el huevo que nos queda, sin batirlo del todo, y vertemos el agua helada. ¡OJO! Agua helada, no congelada. Es decir, dejáis el recipiente con el agua en el congelador durante un ratejo y luego lo sacáis. Sobre todo, no os olvidéis de él. La receta pone 250ml pero aconsejo echar menos para que quede más espeso el mejunje. Volcamos la harina de tenpura y removemos de manera desganada, por tal de que queden grumitos, como el Colocao de toda la vida.


Mientras preparamos la masa, es bueno ir calentando unos 7cm de aceite en una sartén (verticales, no horizontales). Es conveniente que sea de girasol porque el de oliva le da demasiado sabor. Si se usa de oliva, pues el más rebajado, de esos maluchos del día que no sirven ni para aliñar un zapato de lo insípidos que son. Si se hace así, el aceite estará muy caliente y la masa todavía muy fría.

Primero freiremos las gambas. Las rebozamos en la harina de trigo; luego, en la masa de tenpura; y, finalmente, a la sartén. El libro aconsejaba entre unos 30 segundos y 2 minutos, pero yo soy bastante bestia y no sé si suelo llegar a 29 o, siquiera, a 15 con las verduras (soy un cocinero precoz). Debo decir que siempre me han quedado bien. Las retiramos con una espumadera y las dejamos en un plato con una servilleta de papel para que absorba el exceso de aceite.


Con los tirabeques hacemos igual. La zanahoria y la cebolla, en cambio, la mezclamos y, a puñados, la vamos rebozando, pasando por la masa y, a lo bruto, las suicidamos en el pozo de aceite hirviendo. Como podéis ver a mí me han quedado más parecidos a calamares fritos que no a ese níveo y delicado rebozado que es el tenpura. :/



caldo

El último elemento esencial sería el caldo. Este caldo no tiene nada que ver con el puchero que nosotros dejamos al chup-chup con su chirivía, su patata, su puerro, sus garbanzos, etc. Es muy sencillo, tanto que me dio rabia descubrirlo. Se mezclan 60ml de mirin, 60ml de soja, un puñado o un sobre de dashi, se revuelve todo bien con un palo o una cuchara, se vierte en un cazo con 500ml de agua, se lleva a ebullición y listos.





emplate'm

"Emplate'm", como dirían lo cocineros chungos de TV3, que un buen lunes pueden ser de "sa pobla de tota la vida" como de "Kornellá" como de un "piju o sea que te mueres de fàstic".

Yo usaré boles japoneses, que para eso me costaron su dinerito. Molan porque son más grandes que los nuestros de cereales pero no tan enormes como ensaladeras. Además, tienen una ventaja sobre los chinos: son redondos y no cuadrados, no tienen dragones, no son de color rojo o parecidos a la vajilla de tu abuela (si tu abuela tuviera los ojos más rasgados que Bruce Lee sospechando) y, ante todo, son sobrios a la par que elegantes y bellos.


Ponemos los fideos un minutito en agua caliente (del grifo mismo). Serán los primeros que pongamos en el fondo del bol.


Luego, el huevo escalfado, el tenpura, el pollo, el tofu y un poco de cebolleta cruda a trocitos. Las dos gambas las apoyaremos en el borde para que se vean, las pobres. Lo bañamos todo con el caldo caliente.


Podéis ver que me he quedado un pelín corto de caldo. Pero la verdad es que, después, cuando empiezas a comer, enseguida te sobra caldo. XD


Pues nada, lo servimos con una buena Asahi para los que gusten de cerveza.


¡Y A COMER! QUE APROVECHE